El Parque Nacional de Doñana es el humedal más importante de Europa, paraíso de más de seis millones de aves migratorias al año y hogar del lince ibérico, el felino más amenazado del mundo.
Este paraíso único acaba de celebrar el su 50 aniversario. Pero esta reserva de la biosfera, Patrimonio de la Humanidad, no vive exenta de amenazas.
Doñana no está sola tratando de sobrevivir. Hay personas al su lado que la defienden y luchan para conservar lo que más quieren.
El lince es un felino único en el mundo que ha estado al borde de la extinción. El programa de reintroducción de linces de Doñana es ejemplo mundial. Gracias a él, en los últimos años hemos pasado de los 94 ejemplares que quedaban a una cifra que asciende a 600 ejemplares.
No nos damos cuenta, como decía mi abuela, “de lo que tenemos hasta que lo perdemos”, dice José Galán, rastreador en Doñana.