Muy cerca del distrito del diseño e innovación de Barcelona convive una realidad muy alejada de la imagen de ciudad escaparate que pretenden mostrar las autoridades locales. Una realidad donde descubres a cientos de inmigrantes sin papeles que se despiertan cada mañana del sueño europeo que les empujó a abandonar su hogar, en la África subsahariana.
Sin posibilidad de regularizar su situación ni tampoco de encontrar un trabajo, la recogida de chatarra se convierte para muchos de ellos en su único medio de subsistencia.
Una vez aquí, a pesar de las condiciones de vida tan lamentables con las que se han encontrado, la mayoría mantiene su confianza en un futuro mejor en este continente, mientras se resisten a admitir el fracaso que significaría volver a sus casas sin cumplir aquel sueño europeo.