Estudió en las escuelas del Ateneu Igualadí de la Clase Obrera y con 15 años empezó a trabajar en la notaría. Desde muy joven colaboró ​​en las publicaciones deportivas y culturales locales.

Alrededor de 1945, con la recomendación de Josep Mata, entró en la Agrupació Fotogràfica d’Igualada (AFI) y empezó a practicar la fotografía amateur. Los paisajes: mañanas y atardeceres, árboles y arroyos, lo hacían cada día más exigente consigo mismo... «Cada uno de los primeros premios servía para darme más fuerza y ​​deseo de mejora... hasta lograr premios en salones internacionales».

Su manía era hacer uso del filtro rojo, buscando luces y transparencias, que dio fruto en El Zagal, en Esplai y Poesía Matinal, hasta que se dedicó al color, a hacer Johndobianes. Más de 380 premios avalan su trayectoria.

Fotografías del fondo Joan Domingo Bisbal depositado en el Archivo Comarcal de la Anoia.